Los CHINOS EN ARGENTINA: LA COMUNIDAD JUDIA TAMBIEN SE OCUPA DE COMBATIR LA DISCRIMINACION A ESA COMUNIDAD ORIENTAL

Posteado el Mié, 21/03/2018 - 16:54
Autor
Malena Cerezo
Fuente
DAIA texto del libro Exclusión e inclusión III

En los últimos tiempos, hemos podido visualizar un importante interés en aumento sobre la cultura oriental, específicamente la china. Esto puede ser explicado a partir de la apertura económica de los capitales chinos por un lado, así como también, en virtud de la mayor inmigración de China continental.

La primera inmigración china, específicamente la taiwanesa, data de la década ´80. Para el año 2000 se estimaba la existencia de alrededor de 50.000 chinos en nuestro país, siendo la mitad de esa procedencia. Se evidenció un reflujo migratorio en 2001 dada la crisis socioeconómica que atravesó la Argentina. Mientras que a partir del año 2005, las nuevas proyecciones de crecimiento económico y la estabilidad social del país resultaron nuevamente atractivas al ingreso de contingentes chinos. Estimándose que, en la actualidad, el número de la comunidad china residente supera las 90.000 personas[1], llegándose a hablar incluso de unas 120.000[2]. Esta gran inmigración se plasma en: Cantidad de cursos de idioma que hoy existen[3] y en la cada vez mayor participación en actividades culturales de la comunidad china en la Argentina.

Sin embargo, los prejuicios hacia la comunidad persisten e incluso son avalados por figuras de la política nacional. Como analizamos en un trabajo anterior[4], la discriminación hacia la comunidad china puede ser caracterizada bajo dos ejes independientes: por un lado la  llamada “cuestión de clase” y por otro, la “distancia cultural”. Las personas que se acercan a nuestro país en calidad de migrantes se vuelcan a estas tierras en búsqueda de mejores condiciones de vida, siendo el trabajo su principal actividad. La discriminación o el temor que traza una línea fronteriza entre nacionales e inmigrantes está basada, en este punto, en un enfrentamiento entre trabajadores, viendo con recelo la llegada de otros que puedan poner en peligro la tasa de ocupación de los nacionales. Esta cuestión  es compartida por todos los migrantes provenientes de las más diferentes locaciones y culturas.  Por otra parte, la inmensa diferencia cultural genera desconcierto y da lugar, muchas veces, a una falsa oposición de raigambre histórica entre oriente y occidente que genera una mirada de recelo frente a costumbres y universos diferentes en donde se presenta la supremacía de uno como garante de supervivencia.



[2] Pappier Andrea. Inmigración China en la Argentina. El barrio chino en Buenos Aires como estudio intercultural. Asociación Latinoamericana de estudios de Asia y África. XIII Congreso Internacional de ALADAA.

[3] Dictan cursos de chino: La Escuela China Argentina, el Instituto Cultural SinHeng, el CUI (Centro Universitario de Idiomas), el programa “Lengua en los barrios” perteneciente al Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el Instituto Confucio, el Centro Cultural Ricardo Rojas dependiente de la UBA y, algunas otras universidades privadas como la UADE.

[4] Cerezo Malena. Apartado sobre Chinos en Exclusión e inclusión 2. Discursos. Estereotipos. Desigualdad de oportunidades. Prejuicio y Violencia. CES. DAIA.

 
 
 

 

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