Las Comunas: Una nueva y verdadera oportunidad para el Espacio Público

Posteado el Dom, 12/11/2017 - 16:46
Autor
Gabriel Traiman

El paisaje urbano es uno de los elementos del ambiente que requiere ser protegido para poder garantizar a todos los habitantes de la Comuna una adecuada calidad de vida.

 

Debemos  considerar en la Comuna como componentes del Espacio Público a los sitios   abiertos de libre acceso y las vías públicas.

El diagnóstico que allí se presenta concluye que la hegemonía del transporte automotor en las vías públicas ha desplazado y degradado el desarrollo de las restantes funciones urbanas.

Frente a esta situación, se propone la generación de “sistemas verdes” que articulen parques y vías ampliamente forestadas, creación de nuevos parques, plazas y espacios públicos y la mejora de la calidad ambiental de los mismos, conjuntamente con la preservación de edificios y sitios de valor patrimonial.

Consideramos a los lugares públicos como eje del encuentro de la comunidad a raíz del avance de las telecomunicaciones y los nuevos desarrollos comerciales que se nuclean en los ámbitos cerrados y privados.

Ante esta situación se hace necesario revisar, ordenar y sistematizar todo lo referido a los Espacios Públicos  con una visión integradora de la  Comuna dentro de la Ciudad.

Desde la Comuna se deberá actuar sobre los lugares públicos a partir de su concepción, su regulación y las acciones tendientes a su mejoramiento tanto a través de los planes reguladores, la compatibilización de la normativa existente, su actualización, la recepción de las inquietudes de partes interesadas tanto para la confección de Planes o Programas como para ayudar a la modernización de la legislación existente.

El deterioro, no sólo conspira contra la estética y vista de la  Comuna, sino también contra los planes de seguridad y la calidad de vida. Por ejemplo, la profusión de elementos (refugios peatonales, quioscos de diarios y flores, carteles, marquesinas, etc.) que tapan visuales entre la calzada vehicular y la acera peatonal, proyecta áreas de sombra  y oscuridad sobre los peatones, lo que reduce la sensación de seguridad e incrementa las situaciones de riesgo.

Las calles, plazas, grandes espacios abiertos deben garantizar el encuentro de las personas y el desarrollo sin interferencias negativas de las actividades de la comunidad.

La creación de planes consensuados con la comunidad, sobre preferencias de los habitantes de la ciudad  deben ser una realidad y no un mero discurso.

No obstante la certeza de que se requiere un enfoque multidisciplinario a la hora de planificar o restaurar los espacios públicos de la Comuna ya no está puesto en duda, todos los habitantes conocen la realidad de una ciudad desordenada visualmente, con altos niveles de ruido y vibraciones no controladas, falta de higiene, un manejo de los residuos no eficaz, deficiencias en arquitectura de los edificios, etc.

En resumen debe pensarse en proyectos que intenten reafirmar los lazos estrechos entre el cuidado de la apariencia de una Comuna, y su calidad de vida, como el primer paso en pos de un espacio público más ordenado que debe perseguir la revitalización de nuestra comunidad, preservar nuestra herencia cultural y patrimonial, y recuperar nuestro sentido de pertenencia .

Las Comunas deben ser finalmente el motor para establecer un Espacio Público más Seguro, Ordenado y Democrático.

 

Sin votos (todavía)